Joven que mató a dos personas durante protestas en EEUU alega defensa propia

Rittenhouse admitió haber empleado “fuerza letal” contra sus presuntas víctimas esa noche

Rittenhouse admitió haber empleado “fuerza letal” contra sus presuntas víctimas esa noche

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El joven Kyle Rittenhouse, acusado de matar en agosto de 2020 -cuando tenía 17 años- a dos personas durante los disturbios raciales en Wisconsin (EE.UU.), sostuvo este miércoles que disparó en defensa propia, durante su testimonio ante el tribunal que lo juzga.

“No quería matar a nadie, pretendía detener a la gente que me estaba atacando”, dijo Rittenhouse en respuesta a una pregunta del fiscal Thomas Binger sobre si su intención era asesinar a todas las personas contra las que disparó.

El joven está siendo procesado por supuestamente haber matado a dos personas durante el caos desencadenado en Kenosha (Wisconsin) después de que un agente de policía le disparara por la espalda al afroamericano Jacob Blake, que quedó parapléjico.

Ese episodio provocó una ola de protestas contra la brutalidad policial con la comunidad negra, y dos días después, el 25 de agosto, Rittenhouse, mató en esa misma ciudad a dos manifestantes e hirió a un tercero.

Rittenhouse admitió haber empleado “fuerza letal” contra sus presuntas víctimas esa noche.

El joven indicó que uno de los fallecidos, Joseph Rosenbaum, le lanzó una bolsa y una cadena, y que oyó a una persona que estaba con el diciéndole “atrápalo, mátalo”.

En ese momento, según el relato de Rittenhouse, el entonces adolescente, que estaba corriendo, escuchó un disparo detrás suyo, mientras Rosenbaum lo perseguía.

“Conforme me di la vuelta, el señor Rosembaum estaba viniendo hacia mí con sus manos extendidas, recuerdo su mano en el cañón de mi arma”, dijo el acusado, quien reconoció que disparó cuatro veces contra la víctima.

Rittenhouse, que residía en ese momento en el estado de Illinois, afronta cinco cargos, entre los que figuran homicidio intencionado en primer grado e intento de homicidio intencionado en primer grado, y se ha declarado no culpable. De ser condenado, podría afrontar 60 años de prisión.

La vista de este miércoles tuvo que ser suspendida por unos minutos después de que el joven rompiera a llorar cuando describió la noche del incidente.

En otro momento de su declaración, Rittenhouse explicó que prefirió comprar un rifle AR-15, en vez de una pistola, porque pensaba que no podía tener en su poder una de manera legal y porque creía que un AR-15 parecería “cool’ (en español guay, chido, chévere o bacán).

La Fiscalía sostiene que las acciones de Rittenhouse constituyen un homicidio, pero sus abogados alegan que abrió fuego en defensa propia.

La fiscalía ha caracterizado al joven como un “justiciero adolescente” que viajó de Illinois a Kenosha con un rifle semiautomático AR-15 para unirse a otras personas armadas que se veían como guardianes de los comercios locales.

El incidente tuvo lugar en medio de enfrentamientos entre grupos de civiles armados y manifestantes del movimiento “Black Lives Matter” (Las vidas negras importan) en Kenosha.

El entonces presidente Donald Trump defendió a Rittenhouse, simpatizante del ahora exmandatario, y rehusó reunirse con la familia del afroamericano Blake.

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