Miles de católicos marchan en Haití para pedir protección divina ante crisis
Los peregrinos no cesaban en su clamor a Dios y a la Virgen de la Inmaculada Concepción para que “liberen” a la nación
Los peregrinos no cesaban en su clamor a Dios y a la Virgen de la Inmaculada Concepción para que “liberen” a la nación
Miles de fieles católicos haitianos participaron este miércoles en la tradicional procesión de veneración a la Virgen de la Inmaculada Concepción, en un recorrido por calles de Puerto Príncipe que también fue el marco para denunciar la inseguridad y la crisis sociopolítica que atraviesa el país.
Hubo personas que portaban banderas haitianas, otras alzaban pancartas de tinte político en las que denunciaban los males que afectan a la nación más deprimida del continente.
“Mama Marie, este es Ariel de pie como rey”, “Mama Marie, golpea a todos los que traicionaron la lucha del pueblo”, “Mama Marie, exigimos justicia para las víctimas de las masacres de La Saline y otras”, se leía en los letreros.
En la procesión, en la que varias personas se desmayaron, se observaba una carroza con la imagen de la virgen y la leyenda: “Jesús dice una palabra. Una palabra para la liberación de Haití”.
Muchos de los que marcharon mostraban fotos de familiares mientras imploraban a la virgen su protección contra los secuestros, uno de los mayores problemas que enfrenta Haití.
Una de las creyentes, en medio de lágrimas, exhibió su pasaporte en señal de querer abandonar el país.
Durante la procesión, los católicos entonaron varias canciones pidiendo perdón para el pueblo haitiano. Vestidos con camisetas azules o blancas confeccionadas para la ocasión, los fieles cantaron y bailaron a lo largo del recorrido.
Los peregrinos no cesaban en su clamor a Dios y a la Virgen de la Inmaculada Concepción para que “liberen” a la nación, sometida a niveles de inseguridad causados principalmente por los secuestros que ejecutan bandas armadas que se han apoderado de varias zonas de Puerto Príncipe.
La difícil situación haitiana se complicó aún más a raíz del asesinato del presidente Jovenel Moise, el 7 de julio pasado.
A la crisis también se suman la inseguridad alimentaria y el éxodo de miles de personas.
El cabecilla de la principal banda armada de Haití, Jimmy Cherizier, alias Barbecue, ha exigido en reiteradas ocasiones la renuncia del primer ministro haitiano, Ariel Henry, quien a finales de noviembre pasado presentó un nuevo Gobierno en el que figuran conocidas figuras de la oposición.