Juez quiere querellantes de Jhonny Portorreal en audiencia

Falta de tiempo para convocar a las víctimas y cantidad de pruebas contra Portorreal provocaron aplazamiento de la audiencia del caso familia Rosario

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Con el aplazamiento del conocimiento de medida de coerción contra el abogado Jhonny Portorreal Reyes, acusado de estafar a 283 personas de apellido Rosario, tanto la defensa del imputado como el Ministerio Público tienen un reto.

La defensa deberá estudiar las 600 pruebas que depositó ayer el Ministerio Público junto con la solicitud de medida de coerción en contra de Portorreal. A su vez, el órgano persecutor deberá convocar para la audiencia a todas las personas que se querellaron contra el abogado.

“En el día de hoy la defensa solicitó un plazo para poder tomar conocimiento del expediente, dado que nosotros hemos presentado más de 600 pruebas, también como depositamos ayer a las 5:50 de la tarde no era el tiempo suficiente para convocar a todas las víctimas de este proceso, que son más de 250 personas”, explicó la fiscal titular del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, a su salida del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva.

El juez Rigoberto Sena, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de esta jurisdicción, dispuso que la audiencia sea celebrada el próximo viernes 8 de julio a las 9:00 de la mañana e instó a todos los denunciantes a estar presentes.

El Ministerio Público tiene una semana para convocar a 283 personas para que continúen el proceso judicial en contra el principal acusado de la estafa millonaria que llevaba 13 meses fugitivo.

Según el organismo de persecución, el abogado utilizó como método de estafa, el cobro de sumas que van desde los 30 mil a los 40 mil pesos a las personas de apellido Rosario por los supuestos gastos legales y de representación. En total se trata de una estafa de 16 millones de pesos aproximadamente.

Portorreal Reyes y los demás imputados en el caso les aseguraban a las víctimas que por pertenecer a la “familia Rosario” eran herederos de una fortuna y de los terrenos valiosos donde opera una empresa minera.

Por este caso fueron sometidos a la justicia el 25 de mayo del año pasado y guardan prisión domiciliaria con el uso de grilletes electrónicos Miguelina Gómez Santana y Miguel de Oleo Montero, alias Miguelón.

Portorreal Reyes, quien era el único de los imputados que faltaba por someter, fue arrestado por un equipo del Departamento de Prófugos de la Fiscalía el pasado miércoles cuando se encontraba en una villa ubicada en Boca Chica, Santo Domingo Este.

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