Linares, dirigente joven para un equipo joven en el Clásico
Fedobe apela a buena relación de Rodney con el núcleo joven
Tal como adelantó en marzo, Rodney Linares será el encargado de dirigir al equipo dominicano en el Clásico Mundial de Béisbol en marzo próximo.
La Federación Dominicana de Béisbol (Fedobe) lo presentará de manera oficial la mañana de este martes, a través de una teleconferencia con el actual coach de tercera de base de los Tampa Bay Rays desde su hogar en St. Petersburg, Florida.
La actividad será realizada a partir de las 8:30 de la mañana a través de la plataforma Zoom y será pública vía el canal de YouTube de la federación.
El presidente de la Fedobe, Juan Núñez Nepomuceno, y el gerente Nelson Cruz acompañarán a Linares en la actividad.
Linares, de 44 años, goza de la aprobación del núcleo fuerte de jugadores jóvenes que están proyectado a jugar el torneo de 20 países, dicen fuentes cercanas al equipo a para explicar su designación desde un pool donde se consideraron nombres como el de Luis Rojas, Tony Díaz y Carlos Febles, también coaches en la MLB.
El “ok” de los jóvenes fue lo que pesó para la que Fedobe y la gerencia de Cruz inclinarse por el hijo del expelotero Julio “Sijo” Linares, nacido en Nueva York en 1977.
De esta forma, se convertirá en el sustituto de Tony Peña, quien dirigiera al conjunto al título en 2013 y a segunda ronda en 2017. Antes ocuparon el puesto Manny Acta (2006) y Felipe Alou (2009). Los primeros dos con experiencia previa como manager en Grandes Ligas y el caso de Acta eventualmente alcanzó el nivel con Nacionales e Indios.
Un desafío mayúsculo para Linares, uno de los técnicos dominicanos de mayor valoración en las Grandes Ligas, pero para el que no se han unido los planetas para traducir esa jerarquía en la pelota dominicana. En la Lidom, tras una larga etapa como coach de banca de los verdes no dio con las teclas al frente de las Estrellas, Águilas, Gigantes en condición de sustituto. El Escogido le dio la oportunidad de arrancar un proyecto con tiempo el curso pasado, pero fue despedido en noviembre cuando presentaba marca de 12-15, en quinta posición.
El despido de los rojos la campaña pasada ha dejado heridas abiertas con unas incendiarias declaraciones el mes pasado donde atribuía su despido a su renuencia por no mover en la alineación a un Albert Pujols por debajo, como se lo sugería la gerencia.
Si bien en su paso por los Astros se familiarizó con el lenguaje sabermétrico y las estadísticas de última generación para sacar el mayor provecho, que le sirvió para encajar en la filosofía de los Rays, Linares se define como un dirigente pragmático, que no renuncia al mínimo recurso para sacar los resultados.
La trayectoria
Linares comenzó a trabajar como instructor en las bajas ligas menores de los Astros en 1999, con apenas 21 años. En 2007 recibió la primera oportunidad de dirigir y lo hizo con notas altas en los cuatro niveles, cosechando el premio al Dirigente del Año tanto en Clase A Avanzada (2013) como en Doble A (2015).
Una etapa donde le tocó trabajar en el desarrollo de figuras como José Altuve, Alex Bregman, Carlos Correa, JD Martínez y George Springer, una estructura clave para que Houston ganara la Serie Mundial en 2017. Estuvo en funciones de dirigente hasta 2018 y en el trayecto acumuló foja de 762-697. En la etapa también tuvo asignaciones en ligas de novatos como la Dominican Summer League y Arizona Fall League.
Con ese currículo, en noviembre de 2018 llegó la llamada para las Grandes Ligas, pero desde Florida y ya agota su cuarta temporada con una de las organizaciones más avanzadas en el reclutamiento de talento para competir.