Suplidores del almuerzo escolar quebrados

La difícil situación económica de los pequeños empresarios que fueron excluidos del programa para suplir alimentos en las escuelas los ha obligado a insistir una vez más en una protesta frente al Palacio Nacional para pedir la intervención del presidente Luis Abinader. 

Los emprendedores indican una lista de irregularidades que dicen haber observado en los procesos de evaluación y selección de cocinas. Aseguran que los lotes de desayuno escolar se vendieron a 300 mil pesos, que se sobornaron a los peritos, que hicieron las inspecciones, que se asignaron calificaciones incorrectas, que se beneficiaron a políticos del partido de gobierno, y a otros que no cumplían con los requisitos. 

Fabricio Conte dice con tranquilidad: “Nosotros ganamos el lote número 10 y después se lo entregaron a un político de Azua”. 

En esa misma provincia él tiene cerrada su cocina con una inversión de 3 millones de pesos y luego de haber sido suplidor desde el año 2014. Tenía siete empleados. 

Para él, su exclusión se debió a que no está pegado con ningún partido político. Asegura que incluso en la gestión del Partido de la Liberación Dominicana se le vinculaba con el partido de oposición, razón por la cual siempre le daban lotes pequeños. 

Estos suplidores solicitan que se les evalúe de nuevo para poder acceder a la oportunidad de ser integrados. Afirman que  muchos otros suplidores recibieron injustamente lotes enormes que se pudieron haber repartido entre varios pequeños y medianos, que incluso quedan más cerca de las escuelas. 

Elizabeth Berigüete estima que por cada 100 suplidores, 40 quedaron fuera. Dijeron que 800 plazas de pequeños y medianos comerciantes fueron suprimidas o eliminadas al colocar una mayor cantidad de raciones a menos cantidad de empresas, los cuales eliminan más de seis mil empleos directos.