Barty sigue acaparando los reflectores fuera de la cancha

Han pasado 10 meses desde que anunció su retiro a los 25 años, en momentos en que era primera del ranking.

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Ash Barty finalizó 2022 igual que como lo había comenzado: Acaparando los reflectores.

Esta vez no jugará en el Melbourne Park. Han pasado 10 meses desde que anunció su retiro a los 25 años, en momentos en que era primera del ranking.

La próxima semana, cuando comience el Abierto de Australia, Barty no buscará defender el título que ganó en enero pasado para llegar a tres trofeos de Grand Slam y ser la primera anfitriona en conquistar este certamen en 44 años.

De hecho, tal como aclaró recién en las redes sociales, Barty tiene cosas más importantes en mente. Ella y su marido esperan un bebé.

Y aunque la historia de su deporte está llena de ejemplos en que las tenistas se marchan y luego vuelven a la gira —algo que ella misma hizo en su adolescencia—, Barty niega tener planes de un retorno.

Trató de finalizar con una victoria

“En mi mente, nunca va a haber un final perfecto, pero éste fue mi final perfecto”, comentó recientemente Barty, de 26 años. “Nunca se trató de finalizar con una victoria o con algo muy emotivo. Simplemente en el aspecto colectivo se trataba de que yo sintiera que esto era lo correcto. Ahora que la decisión ha llevado a nueve meses de una vida increíble fuera de las canchas, ha sido asombroso”.

Barty ha conseguido mantenerse ocupada. Y ciertamente sigue siendo una celebridad en Australia, donde el tenis es muy popular.

Tras su victoria de 2022 en el Abierto de Australia, sin perder un solo set, Barty le contó a Casey Dellacqua, su excompañera en dobles, que planeaba retirarse.

“No tengo ya la energía física, el deseo emocional ni todo lo que se requiere para desafiarme al más alto nivel. Estoy desgastada”, dice Barty haberle contado a Dellacqua antes de hacer el anuncio que sorprendió a todos, salvo a algunos familiares y amigos cercanos.

Barty recordó aquella conversación este mes, al recibir el premio Don, que lleva el nombre del deportista más célebre de Australia, el jugador de cricket Don Bradman. El honor otorgado por el Salón de la Fama del Deporte Australiano se destina a un individuo o equipo que haya “aportado la mayor inspiración al país mediante su desempeño y ejemplo en el último año”.

Cuatro días después

Cuatro días después, Barty se colgó su quinta Medalla John Newcombe, llamada así por el tenista australiano ganador de siete torneos del Grand Slam en individuales. La presea reconoció a Barty como la mejor tenista del año.

En retrospectiva durante una entrevista televisiva, Barty dijo que el último Abierto de Australia fue “ciertamente” el que más ha disfrutado.

“Me sentí libre”, explicó. “Jugué sin pensar en las consecuencias, como una niña. No había presión en mis ojos. Simplemente era yo tratando de redimirme en cierta forma y jugando como siempre quise, saliendo como una niña que se enamoró del deporte”.

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