Es recomendable que los niños comiencen a hacer ejercicio desde una edad temprana para desarrollar hábitos saludables y para establecer una base sólida para la actividad física en la vida adulta. La American Academy of Pediatrics (Academia Americana de Pediatría) recomienda que los niños entre 6 y 17 años deben hacer al menos 60 minutos de actividad física moderada o vigorosa cada día.
En los niños menores de 6 años, es importante fomentar la actividad física mediante el juego y la exploración, ya que es a través del juego que los niños aprenden sobre su cuerpo y su capacidad física.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada niño es diferente y que su capacidad física puede variar dependiendo de su edad, su salud y su nivel de desarrollo.
Por lo tanto, es importante hablar con el pediatra del niño antes de comenzar cualquier programa de ejercicios para asegurarse de que es seguro y adecuado para su edad y su nivel de desarrollo.
En resumen, es recomendable que los niños comiencen a hacer ejercicio desde una edad temprana para desarrollar hábitos saludables y establecer una base sólida para la actividad física en la vida adulta. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada niño es diferente y consultar con un pediatra antes de comenzar cualquier programa de ejercicios.