¿Cómo ser un buen papá?

Para ser un buen papá los hombres deben fomentar la relación con los hijos y para lograrlo es necesario que el padre sea capaz de conectar consigo mismo y su historia

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Para ser un buen papá los hombres deben fomentar un sano vínculo con sus hijos. Si bien es cierto que antes las madres tenían mayor responsabilidad que los padres en la crianza, con los años ha ido evolucionado y hoy día en muchos hogares el rol se ha ido equilibrando, tal y como explica la psicóloga Nancy Patricia Cano. Ahora los padres tienen una participación más activa en el cuidado de los niños y la casa; y las madres están aportando económicamente en sus hogares.

“La realidad ha cambiado por la naturaleza del trabajo de ambos padres, llevando a muchas parejas a entender que lo ideal es tener la responsabilidad compartida en la crianza de los hijos”, dice Nancy.

Más allá de la transformación social que ha obligado a redefinir los roles de cada hombre y mujer. También los especialistas recomiendan que los padres tengan una participación más activa con sus hijos. Las psicólogas Nancy Patricia Canó, del espacio (@eduaccion), y Laura Pichardo (@laurarpichardo) hablan con El Profe Show sobre el tema.

La profesional de la conducta, Nancy Patricia Canó asegura que tanto los padres como las madres son igual de importantes en el proceso de crianza de los hijos. Así que es de ambos la responsabilidad de promover y potenciar su desarrollo socioemocional, físico, cognitivo y del lenguaje.

“Una sana relación e interacción con ambos padres garantizará que ese niño o esa niña tenga buenas relaciones humanas y desarrolle habilidades sociales que le permitirán interactuar socialmente con mejores destrezas y resultados”, dice Canó.

“La figura paterna es sumamente significativa en el desarrollo socio emocional del niño. El apego seguro y saludable con los hijos favorece una sana autoestima y el desarrollo de seguridad y autonomía. La presencia activa de la figura paterna promueve la sana diferenciación del niño de la figura materna”Laura Pichardo Psicóloga clínica y terapeuta familiar

Canó agrega que la gran diferencia entre ambos padres radica en el período de gestación y el de la lactancia, donde la madre tiene el rol preponderante. Sin embargo, aún en estas dos etapas, el papel del padre es bien relevante ya que acompañar y colaborar con la madre durante estos períodos se tornará en mayor bienestar y seguridad para ella. Esto la fortalecerá emocionalmente y se transferirá al bebé promoviendo importantes beneficios en su desarrollo.

Relación padre e hijos

Laura Pichardo explica que “para fortalecer la relación con los hijos es necesario que el padre sea capaz de conectar consigo mismo y su historia. Esta conexión es el punto de partida que le permitirá construir una relación saludable y cercana con los hijos”.

Al mismo tiempo, agrega que la relación se fortalece cuando un papá es capaz de aceptar a su hijo tal cual es, dedica tiempo de calidad, responde a sus necesidades, practica la escucha activa y fomenta la cercanía emocional.

Al referirse al tema, Nancy Patricia Canó afirma que “ayudar a los hijos a ser inteligentes emocionalmente es tarea de ambos padres. Ambos deben acompañar a sus hijos a crecer sanamente y esto implica desarrollar una buena afectividad, un buen manejo de sus emociones, tolerancia a la frustración, autoestima y habilidades como la empatía, la negociación y la resolución de conflictos. Todo esto se logra creando lazos afectivos y una buena conexión”.

“Cuando ambos padres se involucran de forma activa en la crianza de los hijos, estos tienden a ser niños y niñas más sociables, a tener mucho mejor rendimiento escolar y a ser más felices”, agrega la especialista.

Un aspecto importante que destaca Nancy es la necesidad de que ambos padres regulen sus emociones, para poder expresarlas de forma adecuada, además de poder reconocer y empatizar con las emociones de sus hijos. Esto contribuye enormemente al desarrollo socio-emocional de sus hijos y promueven en ellos el desarrollo de su inteligencia emocional.

Actividades para fortalecer el vínculo

La psicóloga Laura Pichardo comparte una lista de actividades que los padres pueden realizar para fortalecer el vínculo y crear esa conexión con sus hijos. “Existe una gran diversidad de actividades posibles, lo importante es que estas deben ser adecuadas a la edad de los hijos, a sus gustos y a las posibilidades socio económicas de la familia“.

1. Crear salidas especiales de papá- hijo/a: la idea es que estos espacios sean exclusivos para ellos, sin participación de la figura materna. Es importante que esta actividad sea pensada para que sea de disfrute para ambas partes.

2. Jugar activamente: muchas veces pensamos que para realizar actividades en común es necesario salir del hogar. Sin embargo, los niños disfrutan de la presencia activa de los padres a través del juego. Esto puede aplicar tanto para los niños pequeños como para adolescentes.

3. Abrir espacios de diálogo: brindar a los hijos espacios de escucha activa, les transmite la confianza e interés genuino por parte de papá. Aquí es importante enfocarse en escuchar los pensamientos, sentimientos, intereses y puntos de vistas de los hijos. Evitar juzgar o criticar.

4. Fomentar espacios especiales en casa que favorezcan la creación de rituales compartidos, como leer juntos, ver una película o serie, cocinar, compartir lo mejor del día.

¿cómo tener niños sanos emocionalmente?

Nancy, también educadora, agrega que la clave para que un niño o niña adquiera un óptimo desarrollo es tener a un padre presente, que sirva de modelo en valores y que tenga una sana relación sean (papá y mamá) pareja o estén separados. “Tener una buena relación con el padre, incidirá positivamente en la personalidad y en el desarrollo socio-emocional del niño o la niña”, afirma.

La psicóloga asegura que mientras más se involucre el padre en todos los procesos de su hijo, mejores serán los resultados en su desarrollo. Lo importante para el niño y la niña no es la actividad que esté desarrollando con su papá, lo trascendental en la vida de ese niño o niña es el nivel de interacción con su papá, el tiempo de calidad que comparten y los lazos afectivos que construyan juntos.

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