Cosme Peña sostiene que no se probó colusión en licitación de libros de texto

Advierte elaboración propia de libros del Minerd generará “gran problema”

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El presidente de Editora CP y miembro de la Asociación de Editores y Distribuidores de Libros de Texto de República Dominicana (Asedilird), Cosme Peña, declaró que la dirección ejecutiva de Procompetencia determinó el 29 de diciembre de 2022 que no se probó colusión en la licitación de los textos escolares de secundaria para el período 2022-2023.

Refirió que el Informe Confidencial de los resultados de la investigación preliminar sobre el proceso de compras MIINERD-CCC-PEEX-2022 003 citó “que del análisis de las informaciones presentadas no se detectaron elementos que pudieran configurarse en indicios de la existencia de alguna práctica anticompetitiva en la modalidad de concertación o coordinación de ofertas en licitaciones públicas; razón por la cual este órgano instructor no se encuentra facultado para iniciar un procedimiento de investigación formal con respecto al proceso de compras en cuestión”.

Haciendo referencia a publicaciones de medios de comunicación, Peña sostiene que Primitivo Santos, cuya cédula coloca como profesión chofer, “no es chofer ni tampoco es autor de los libros”. Asegura que cuenta con “certificaciones de la ONDA, de otras editoras de texto, donde es usual que las representantes de las editoriales, que nunca han escrito un libro, aparezcan como autores”.

Señaló que el 29 de septiembre de 2022 depositaron un documento donde se ponían a disposición para aclarar cualquier duda sobre el proceso, y de la que asegura tener una comunicación por parte de la DGCP, con fecha del 15 de diciembre, que indica que “no estamos apoderados de ningún proceso investigativo”.

“Elaboración  propia”

Peña cuestiona también la decisión llevada a cabo por el Ministerio de Educación, realizada por el actual ministro Ángel Hernández, de elaborar los libros de texto de manera “propia”. Dice que en “Primaria no habrá un gran problema, porque con los libros adquiridos en 2021, que todavía están en las aulas, se podrá trabajar como se hizo en el recién pasado año escolar, pero el problema grande continúa en Secundaria, donde no hay libros desde hace más de seis años y se niegan a utilizar los libros licitados, adjudicados y recibidos conforme “.

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