Preguntas que debes hacerte antes de cambiar de trabajo

Es muy probable que todos, al menos en una ocasión de nuestras vidas, hayamos considerado cambiar de trabajo, ya sea por falta de oportunidades de crecimiento, un ambiente laboral toxico o salarios y beneficios insuficientes. Sin embargo, esta no es una decisión que se deba tomar a la ligera.

La experta en gestión estratégica del capital humano y en bienestar organizacional Luisa Bernhardt Franco (@luisabernhardt) comparte ocho preguntas que debes hacerte antes de considerar empezar de cero en un nuevo trabajo. 

1. ¿Por qué quieres cambiar de trabajo?

Antes de dar el paso, es crucial analizar tus razones. Pregúntate si estás en búsqueda de un nuevo desafío, una mejor cultura laboral o un equilibrio trabajo-vida más saludable. Evalúa si tus expectativas son realistas y si estás dispuesto a enfrentar desafíos en el camino hacia un nuevo empleo.

Además, piensa en lo que deseas en tu futuro laboral. ¿Buscas crecimiento, beneficios adicionales o una mejor reputación? Reflexiona sobre tu visión a largo plazo y asegúrate de que tu próximo trabajo te acerque a tus metas profesionales. Considera estos aspectos con atención y toma decisiones informadas para una transición laboral exitosa.

Entender tus motivaciones es como encontrar el faro que guía tu barco. ¿Sientes que has llegado al límite de tu actual puesto o estás buscando un nuevo faro que te ilumine en un nuevo rumbo? Identificarlo te permitirá navegar con determinación hacia tu próximo empleo.

2. ¿Qué tipo de empresa te atrae?

Cuando contemplas cambiar de trabajo, es vital considerar el tipo de empresa que deseas. ¿Te atraen las corporaciones multinacionales con oportunidades globales o prefieres organizaciones más pequeñas donde puedes tener un impacto directo? Es importante visualizar dónde te sientes más cómodo y realizado.

Pregúntate si buscas una cultura laboral diversa y colaborativa o si prefieres una empresa con una estructura jerárquica más sólida. Define tus valores y prioridades laborales, y luego busca empresas que se alineen con tus metas profesionales y personales. A medida que explores tus opciones, mantén en mente que la elección de la empresa adecuada puede marcar una diferencia significativa en tu satisfacción laboral.

3. ¿Cómo afectará este cambio a tu vida cotidiana?

Cuando consideras un cambio de trabajo, debes sopesar cómo afectará tu vida cotidiana. Comprende que esta decisión puede influir en tus rutinas, tu equilibrio entre el trabajo y la vida personal e incluso en tus relaciones. Reflexiona sobre los desafíos potenciales y las ventajas que podrían surgir.

Tómate el tiempo para analizar cómo se ajusta el nuevo trabajo a tus compromisos y responsabilidades actuales. Evalúa si el cambio podría requerir una reubicación geográfica, ajustes en tus horarios o un nuevo enfoque en tus metas personales. La planificación y la adaptabilidad son clave para minimizar las interrupciones y garantizar que este cambio laboral sea un paso enriquecedor en tu vida.

4. ¿Qué quieres lograr a largo plazo?

Pregúntate a ti mismo qué deseas lograr en tu carrera profesional y cómo este cambio puede contribuir a esos objetivos. Imagina dónde te ves dentro de cinco, 10 o incluso 20 años y considera cómo este nuevo trabajo se alinea con esa visión.

Este proceso de reflexión te permitirá establecer metas laborales más sólidas y claras. Piensa en las habilidades que deseas desarrollar, las posiciones a las que aspiras y el impacto que deseas tener en tu campo. Definir tus objetivos a largo plazo te ayudará a tomar decisiones más informadas sobre tu carrera y a asegurarte de que cada paso que des te acerque más a tus sueños profesionales. Pregúntate si el nuevo trabajo ofrece oportunidades de crecimiento y desarrollo que se alineen con tu hoja de ruta.

“Cambiar de trabajo no es solo un cambio de lugar, es un proceso completo que abarca desde la búsqueda hasta la adaptación a un nuevo entorno laboral. Estar preparado para este proceso es esencial para garantizar un cambio exitoso”Luisa Bernhardt Franco Experta en gestión humana“

5. ¿Son realistas tus expectativas?

Evalúa con sinceridad qué tan realistas son tus expectativas. En ocasiones, las personas pueden idealizar demasiado un nuevo empleo, pensando que resolverá todos sus problemas profesionales o personales. Sin embargo, debes mantener los pies en la tierra y considerar si tus expectativas son razonables.

Una forma de abordar esto es investigar a fondo la empresa y el puesto antes de aceptar cualquier oferta. Investiga sobre la cultura de la empresa, sus valores, sus políticas laborales y sus antecedentes en términos de desarrollo profesional. Habla con personas que trabajen en la organización o que hayan tenido experiencias similares en el pasado. Esto te proporcionará información valiosa para determinar si tus expectativas se ajustan a la realidad. 

6. ¿Cómo impactará en tu crecimiento profesional?

Considera cómo esta transición influirá en tu crecimiento profesional. Pregúntate si la nueva posición te brindará oportunidades para desarrollarte y avanzar en tu carrera. Analiza si la empresa ofrece programas de capacitación, mentorías o proyectos desafiantes que te permitan adquirir nuevas habilidades y conocimientos.

Una forma de evaluar esto es investigar el historial de crecimiento y promoción de empleados dentro de la organización. Comunica tus metas profesionales al empleador durante el proceso de entrevista y verifica si están alineados en cuanto a tu desarrollo. 

Siempre es recomendable elegir una opción que te brinde un camino claro hacia el progreso y donde tus esfuerzos sean reconocidos y recompensados. Recuerda que un cambio de trabajo puede ser una oportunidad valiosa para expandir tu horizonte profesional y alcanzar tus metas a largo plazo, pero es crucial que el nuevo empleo te ofrezca el espacio y los recursos para hacerlo.

7. ¿Qué beneficios adicionales ofrece el nuevo trabajo?

Cuando consideras un cambio de trabajo, no te limites a evaluar solo el salario base. Explora los beneficios adicionales que la nueva posición puede ofrecerte. Pregunta sobre el paquete de compensación total, que incluye aspectos como bonos, comisiones, incentivos y otros complementos financieros. Además, investiga los beneficios no monetarios, como seguros de salud, planes de jubilación, días de vacaciones pagados y posibles opciones de trabajo remoto o flexibilidad en el horario.

Estos beneficios pueden tener un impacto significativo en tu calidad de vida y bienestar. Un salario más alto puede ser atractivo, pero si se acompaña de beneficios escasos, podrías encontrarte con una oferta menos atractiva en general. 

Evalúa qué aspectos valoras más en tu vida y carrera, y asegúrate de que el nuevo trabajo los satisfaga. Al tomar en cuenta todos los beneficios adicionales, puedes tomar una decisión más informada y considerada sobre si el cambio de trabajo es la elección correcta para ti. 

8. ¿Cuál es la reputación de la empresa en el mercado laboral?

La reputación de la nueva empresa a la que migras en el mercado laboral puede desempeñar un papel crucial en tu decisión. Investiga y obtén una comprensión clara de cómo la empresa es percibida por sus empleados actuales y anteriores, así como por la industria en general. Una empresa con una sólida reputación suele ser un indicador de un entorno de trabajo más saludable y oportunidades de crecimiento.

Además, la reputación de la empresa puede afectar tu propia trayectoria profesional. Trabajar para una organización bien vista puede abrir puertas en el futuro y proporcionarte una red de contactos valiosa. Por otro lado, una empresa con mala reputación podría perjudicar tu progreso y satisfacción laboral a largo plazo.