La Corte Suprema revisará las inhabilitaciones de opositores, incluyendo a María Corina Machado

Las inhabilitaciones políticas son una vieja arma del chavismo

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Un nuevo paso en los acuerdos electorales entre el gobierno y la oposición de Venezuela al anunciarse el mecanismo dispuesto para revisar las inhabilitaciones políticas contra los detractores de Maduro, incluyendo a la aspirante María Corina Machado. El procedimiento se hizo público cuando estaba por vencer un ultimátum de la Casa Blanca.

Quedaban solo tres horas para que terminara el 30 de noviembre en Venezuela y se cumpliera el plazo dado por Estados Unidos para que el gobierno de Nicolás Maduro anunciara una ruta para el levantamiento de inhabilitaciones políticas de sus opositores cuando el Reino de Noruega informó que había recibido tal procedimiento.

Noruega sirve de facilitador en el diálogo entre gobierno y oposición, y a través de sus redes sociales publicó un documento que plantea que cada inhabilitado deberá solicitar un amparo y presentar descargos ante el Tribunal Supremo de Justicia, entre el primero y el 15 de diciembre.

También se exhorta a los aspirantes a candidaturas presidenciales a evitar emitir “conceptos ofensivos o irrespetuosos contra las instituciones del Estado”. El Supremo está conformado principalmente por adeptos de Maduro.

Los inhabilitados deberán introducir un “recurso contencioso administrativo” y una solicitud de “amparo cautelar” durante los próximos 15 días, contados de forma continua desde el 1 de diciembre.

La Corte, en tanto, deberá pronunciarse sobre la admisión de la demanda en un plazo no establecido, pero “conforme a los principios de celeridad, eficiencia y eficacia recogidos en la Constitución”.

Será el camino que deberá tomar María Corina Machado, que arrasó en las primarias opositoras del pasado 22 de octubre. Sobre la exdiputada pesa una inhabilitación política por 15 años que no le ha sido notificada formalmente. La medida se hizo pública en junio pasado luego de que un crítico de Machado “pidió información” a la Contraloría.

Más temprano, Washington había insistido en que esperaba pasos concretos por parte de Maduro antes del cierre del día, so pena de volver a endurecer las sanciones que aligeró en octubre luego del acuerdo electoral entre el gobierno u la oposición de Venezuela. La Casa Blanca también espera la liberación de presos políticos de nacionalidad estadounidense.

Las inhabilitaciones políticas son una vieja arma del chavismo gobernante para sacar a sus rivales del camino.

Los altos voceros del oficialismo, de hecho, han insistido en que no permitirán la candidatura de la opositora Machado, a quien acusa de alentar sanciones y una invasión extranjera.

El jefe de la delegación del gobierno en las negociaciones, Jorge Rodríguez, celebró el nuevo acuerdo alcanzado, pese a que en el pasado ha dejado claro que opositores que hayan cometido “un crimen” no pueden ser candidatos.

 “Hoy hemos dado un paso más en la dirección correcta, ratificando lo acordado en Barbados, para hacer respetar las decisiones de las instituciones, del Estado de derecho y la Constitución en Venezuela. Seguimos avanzando. Dentro de la Constitución todo, fuera de la Constitución nada”, dijo Rodríguez en X, antes Twitter.

Machado, que sostiene que no reconoce la inhabilitación en su contra, no se ha pronunciado sobre la revisión de las inhabilitaciones.

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