Realizan jornada de reforestación con método Miyawaki en comunidad de SDN

En esta segunda etapa del proyecto estudiantes serán parte del monitoreo

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La Fundación Loyola 79 inició este miércoles la segunda etapa de un proyecto con el que busca desarrollar en República Dominicana bosques con el método de siembra Miyawaki. En esta fase la iniciativa contará con la participación de estudiantes del Liceo Julián Moreno, ubicado en la comunidad Mata San Juan, en el muniicpio Santo Domingo Norte en la provincia Santo Domingo. 

El biólogo y naturalista Andrés Zaglul manifestó que el sistema, desarrollado en los años 70 por el botánico japonés Akira Miyawaki, se basa en lo que se denomina desarrollo del suelo.

¿Qué es el método Miyawaki?

“El suelo se va preparando con materia orgánica, se va arando el suelo, integrando componentes y luego se le pone un sistema de riego permanente, que garantiza que las plantas no morirían”, sostuvo Zaglul. 

El también vicepresidente de la Fundación Loyola 79 indicó que otra característica del sistema es que las plantas se siembran una cerca de la otra, “para que una le vaya dando sombra a la otra y se genere una red de raíces. Eso hace que se desarrollen más rápido, que se produzcan una serie de microorganismos en el suelo”. 

En el proyecto participa la empresa Aquaplástica, que, según los desarrolladores de la iniciativa, cedió 2,000 metros cuadrados de terrenos cercanos al liceo para la reforestación mediante el método nipón. 

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Conciencia ecológica 

Zaglul sostuvo que esta iniciativa es el primer bosque Miyawaki que realizan ligado a un centro educativo.

  • “Eso tiene un gran valor porque estos estudiantes van a ir creciendo con esa conciencia ecológica y van a ir desarrollando temas de prácticas y experimentos que harán dentro del bosque y nos servirá como base para nosotros saber qué tanto crece cada especie de árbol”, detalló. 

Agregó que cada planta estará en un inventario y los estudiantes serán los encargados del monitoreo. “En menos de un año tendremos árboles de 10 o 12 pies de altura, en dos años tendremos en 12 o 15 pies”, como en la primera jornada que realizaron en Santiago.

Para Miguel Krauch, de Aquaplástica, la idea de esta iniciativa es “enseñar a los estudiantes la evaluación de estos proyectos y que queden con esa inquietud, que cuando vayan a la universidad se conviertan en personas que puedan impactar en un mundo que se caliente menos y con conciencia de preservar”.

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