Aplicaciones de citas: todo lo que no te cuentan
¿Usas aplicaciones de citas? Hay muchas y variadas
Muchas personas hoy día usan aplicaciones de citas. Las hay muchas y muy variadas y cada una tiene sus metas y deseos específicos. Pero aquí hablaremos de todo lo que no te dicen sobre estas aplicaciones.
Tinder, Happn, OkCupid, Grindr y más. Actualmente hay estimaciones que indican que tan sólo Tinder tiene aproximadamente 57 millones de usuarios alrededor de todo el mundo. Son muchas las aplicaciones de citas que hay en el mercado, pero todas tienen algo en general y es que provocan un elevado malestar psicológico, ¿lo sabías?
Con el uso de estas aplicaciones es probable que se experimente ansiedad, estrés y agotamiento. Son muchas las personas que, después de ciertas vivencias poco positivas, se sienten frustradas con la utilización de estas apps.
Un estudio reciente del Centro de Investigaciones Pew, con sede en Washington, señala que las mujeres jóvenes se sienten cada vez más acosadas. Pero las aplicaciones no son exclusivas de la población joven: el número de usuarios mayores de 55 que utilizan dichas apps se ha doblado en los últimos dos años.
¿Por qué generan agotamiento?
Con el uso de estas aplicaciones, las personas se inmiscuyen en una dinámica relacional en bucle, acelerada y agotadora: hay una primera cita, no tan grata, se vuelve a iniciar con un nuevo match, una nueva relación de algunas semanas para volver al inicio.
El match tiene que ver con encontrar perfiles respecto a las afinidades, las fotos y alguna situación superficial, pero hacer match o coincidir con alguien no significa que exista una sintonía real.
Además, hay muchos fantasmas en el mundo online, aquellas personas que en un momento dado prefieren desaparecer sin decir nada, lo que se conoce como ghosting. Y precisamente el ghosting o el acoso online son dos de los fenómenos más desgastantes y dolorosos.
¿No debes usar aplicaciones de citas? Para nada. Simplemente debes tener cuidado y hacer un buen uso de estas aplicaciones. Y, claro, recuerda que el amor también puede encontrarse fuera de una pantalla.