Acido del diablo se le Aplicará un plan de trazabilidad para controlar la venta

Abinader exige acabar con el "miserable ácido"

Abinader exige acabar con el “miserable ácido”

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Este mes se cumplen una vez desde que se prohibió la venta “masiva” de productos ácidos para desenchufar tuberías y carreteras, conocido popularmente como ácido del diablo. Sin embargo, la resolución 104-2010 no ha detenido su comercialización ni su uso en agresiones físicas que han provocado lesiones graves e incluso la muerte.

La reciente muerte de Yanelis Arias López, que fue quemada tras ser rociada con el “ácido del diablo”, vuelve a encender las alarmas ante los ataques que se han ido incrementando en los últimos meses.

Este jueves, el presidente Luis Abinader exigió acabar con “ese lamentable ácido”, algo que pidió que se lleve a cabo en los próximos meses. “Quiero que ese desafortunado ácido desaparezca de República Dominicana en los próximos meses. Con ProConsumidor al frente y un equipo multiinstitucional, no vamos a permitir que ese derivado que ha traído tanto luto y desgracia a las familias dominicanas se quede presente y disponible ”, dijo Abinader durante su participación en el“ Primer Foro Nacional de Actores de Protección al Consumidor ”, organizado por Proconsumidor.

Un mapa de trazabilidad

El mandatario dijo que, con Proconsumidor al frente, se creará un equipo multisectorial para no permitir que el ácido del diablo quede disponible para la compra, y que todo el peso de la ley recae sobre quienes lo tienen disponible para la venta.

Para ello, el Gobierno aplicará un plan de trazabilidad igual al que existe para evitar la venta de metanol para fabricar bebidas adulteradas. El director ejecutivo del Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Proconsumidor), Eddy Alcántara, dijo que la misma tabla de trazabilidad, encabezada por la Dirección General de Aduanas, para trabajar con alcohol ilícito, también se encargará de controlar la distribución. de productos derivados de los ácidos sulfúrico, clorhídrico, nítrico y cualesquiera otros corrosivos, conforme a lo dispuesto en la resolución 104-2010.

Alcántara dijo que este viernes se reunirá con representantes del Ministerio Público, Policía Nacional y el Ministerio de Salud Pública, para aplicar los protocolos pertinentes, que incluyen un registro que rastrea todo el camino que recorren este tipo de químicos.

“Lo que establece la resolución es que todo aquel que adquiera (plomo, ácido propílico y amoniaco) debe estar debidamente inscrito y debe establecer el propósito en ese registro, ya sea una empresa de ingeniería u otra que requiera alguno de estos productos. Esto nos ayudará, en caso de que ocurriera un caso lamentable, a iniciar una investigación ”, dijo el titular de Proconsumidor en entrevista

Resultados de las operaciones

Dijo que desde hace varias semanas se iniciaron varias operaciones en Gran Santo Domingo, San Pedro de Macorís, San Cristóbal y Santiago con el objetivo de retirar del mercado todos los químicos con los que se fabrica el llamado “ácido del diablo”.

“Cuando hemos realizado las operaciones nos hemos encontrado con que, en las mismas góndolas, tramerías, encontramos el plomo, el ácido propílico y el amoniaco. Esto dejó en claro que el comerciante estaba consciente de que su combinación podría usarse para afectar la integridad de un ciudadano ”, dijo el funcionario.

Reveló que han incautado cientos de químicos que componen el “ácido del diablo” en diferentes establecimientos comerciales, los cuales han sido sancionados y multados.

Alcántara expresó que han comunicado a los propietarios de los establecimientos que está prohibido comercializar estos productos fuera de lo establecido por la Resolución 104-2010.

El director ejecutivo de Pro Consumidor agregó que espera dentro de dos semanas poder decirle al país que la mayoría de estos productos químicos han sido retirados de establecimientos que no están autorizados a comercializarlos.

Sanciones civiles y penales

Según la resolución de 2010, el “ácido del diablo” sólo puede venderse “exclusivamente” para procesos industriales, empresas de servicios y técnicos debidamente autorizados para su uso.

Sin embargo, desde hace años es común encontrar productos como “plomería” en tiendas de abarrotes, ferreterías y otros negocios, a pesar de que su posesión, producción y venta conlleva sanciones administrativas, civiles e incluso penales, según la resolución 124- 2010. emitido por Pro Consumidor.

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